Equipo de protección personal (EPP)
El EPP ayuda a mantener protegido y seguro al trabajador, es la última línea de defensa entre éste y el peligro.
Anteojos de seguridad: La protección ocular tiene como objetivo resguardar los ojos de los impactos de partículas y la radiación generada por luz visible y por ultravioleta e infrarroja.
Se recomienda usar anteojos con viseras laterales o protección (“goggles”) para evitar lesiones en ojos y rostro.
Vestimenta adecuada: debe proteger de los factores que se encuentran en el ambiente de trabajo y que signifiquen un riesgo para sus usuarios y a la vez no dejar de ser confortable.
La ropa de trabajo debe disminuir todo tipo de riesgo de accidente en la tarea. Se debe evitar ropa suelta o desgarrada, ya que puede quedar atascada en bordes, superficies rugosas o piezas en movimiento.
Calzado de seguridad: en la actualidad podemos encontrar calzados que además de seguridad proporcionan confort y ergonomía además de estar aprobados por normativa.
Deben ser aislantes, con puntera rígida y suela reforzada con un material duro y resistente a los hidrocarburos y aceites. También protegerán en caso de peligros no eléctricos presentes como clavos en el piso, objetos pesados, etc.
Casco: debe proteger su cabeza de golpes y objetos que caen. Los cascos se deben usar con la visera hacia adelante para que lo protejan de manera adecuada.
Protección para los oídos: reducen los efectos del ruido excesivo en la audición, para evitar que llegue al oído interno y produzca un daño. Se utiliza siempre que exista la posibilidad de que se produzcan ruidos elevados mientras se trabaja.
Guantes de seguridad: Pueden cubrir parcial o totalmente las manos, evitando posibles riesgos de amputación, quemaduras, cortes, fracturas, abrasiones, etc. También protegen frente a infecciones y ayudan a desarrollar mejor el trabajo gracias al agarre antideslizante.Es importante mantener limpio en buenas condiciones el EPI y renovarlo periódicamente.

Recuerda: la seguridad es una forma de vida.




